lunes, 21 de marzo de 2011

msn

Antes del comienzo de la Barcelona World Race, realizamos una serie de descargas periódicas y controladas de nuestras baterías. Con esto comprobábamos su funcionamiento, las “acostumbrábamos” al trabajo y confirmábamos nuestros consumos.

Ahora en Wellington, la descarga la estamos sufriendo nosotros. Hace ya días que estamos descargándonos, primero con cierto control pero al final la descarga ha podido a la cabeza. Y es que la espera es la más agotadora de las actividades cuando se tiene prisa.

Pero, como con las baterías del barco, no llegamos a ese punto donde ya no hay recuperación y siendo así tenemos que encontrar cuál el sistema óptimo de carga, que nos vuelva a poner al nivel que necesitamos.

Debemos imaginarnos que esto es una calma más, tan desesperante como las anteriores, pero sabemos que tarde o temprano saldremos de ella. En esas calmas tuvimos momentos muy duros, hasta que conseguimos encontrar como aprovecharlas, como adaptarnos a ellas. En nuestro caso la ayuda fue el sentido del humor y el convencimiento de que recuperaríamos terreno. Posiblemente nos hicieron más marinos.

Y ahora no va a ser diferente. Saldremos de esta calma y seremos más fuertes que antes. Encontraremos dentro de nosotros cosas qué nos hacen continuar, qué nos harán avanzar. Y si no es en nosotros, será en nuestro compañero.

Empezamos a recuperar la fuerza, poco a poco, pero tenemos tiempo. ¡¡Seguimos!!


Juan Merediz
PasióndeMar S.L.